¿Cuánto pagarías por el lápiz labial o el cepillo de tu celebridad favorita? Quizá estés actuando bajo la "mágica ley del contagio". Los psicólogos Paul Bloom y George Newman, de la Universidad de Yale (EE.UU.), descubrieron que las personas añaden valor a un objeto si creen que ha sido tocado por una estrella admirada, como si mágicamente absorbiera sus cualidades.
Llamaron "contagio" a este pensamiento absurdo en el que la esencia de una persona puede ser transferida a un objeto a través del contacto físico. Los resultados de su investigación, publicados en Proceedings of the National Academy of Sciences, son un ejemplo de cómo la creencia en la magia y las supersticiones sigue presente en la sociedad.
Durante el estudio, analizaron el precio que alcanzaron más de 2 mil objetos del expresidente estadounidense John F. Kennedy, la actriz Marilyn Monroe y el corrupto financiero Bernie Madoff durante varias subastas. Pidieron a un grupo de voluntarios calificar dentro de una escala del uno al ocho cuánto contacto creían que habían recibido los objetos de sus famosos dueños (las casas de subasta no lo especifican).
Encontraron una relación importante entre el contacto físico percibido y el precio que alcazaba el objeto por encima de las expectativas de las casas de subasta. Sin embargo, en el caso del poco apreciado Madoff, los objetos perdían valor conforme más se creía que habían sido tocados por él. Curiosamente, esta tendencia no aplicaba cuando se trataba de joyas de más de 10 mil dólares. Si la inversión es seria, la "magia del contagio" desaparece, concluyen los investigadores.
Posteriormente, pidieron a 435 voluntarios hacer una oferta por un suéter hipotético bajo uno de los siguientes tres escenarios; había sido esterilizado (por lo que ya no contenía la "mágica esencia" de la celebridad al que había pertenecido), había sido tocado por otras manos o nunca más podría ser vendido (por lo que ya no tendría valor monetario).
Los participantes estaban dispuestos a pagar 14.5% menos si el suéter había sido esterilizado y 8.9% menos por el suéter que no podrían vender (indicando que el valor de la "esencia" de la celebridad era mayor que el monetario). El suéter que había estado expuesto a otras manos no sufrió una disminución de valor (indicando que la "esencia" no se contamina ni borra fácilmente). Una vez más, los resultados en cuanto al suéter de Madoff fueron opuestos, alcanzando su máximo valor tras ser esterilizado. Si no fuera por el "poder del contagio", la prenda tendría un mismo valor, sin importar a quien perteneció.